La experiencia fue decepcionante. La cama era muy dura, lo cual me dejó a la deriva en un mar de incomodidad. Además, el desayuno era escasito y ridículo. Como si fuera poco, esperaba un trato preferencial, pero solo obtuve la misma habitación que un cualquiera. Casi escribo una reseña positiva, pero ¡no pude!

Las habitaciones tienen una decoración encantadora que realmente aporta un ambiente acogedor. Además, la ubicación permite acceder fácilmente a la espectacular naturaleza de la zona.

No dispone de ascensor, lo que complica el manejo de las maletas. La cama doble es bastante pequeña y la temperatura en la habitación era fría, a pesar de tener el radiador al máximo. Además, el acceso a internet no funcionó durante nuestra estancia, lo que dificultó planificar nuestras visitas.

El patio es un lugar de ensueño, y el servicio es excepcional 🤗. La decoración es muy cuidada y acogedora, ideal para desconectar y disfrutar de la naturaleza.

La temperatura de la habitación podría mejorarse, ya que se sentía algo fría. sería genial tener más opciones de pan fresco en el desayuno.

Un retiro tranquilo en la naturaleza

La ubicación del hotel es ideal, ofreciendo fácil acceso a la impresionante Ermita de San Frutos y las Hoces del Duratón. Disfruté de un desayuno completísimo, que me dio energía para mis excursiones. El personal siempre fue amable y servicial, brindando un trato cercano que hizo que me sintiera como en casa.

Aunque mi estancia fue maravillosa, eché de menos un salón acogedor donde poder leer. creo que un par de luces laterales en la habitación mejorarían la experiencia a la hora de leer en la cama. La habitación, si bien estaba decorada con encanto, era un poco pequeña.

La decoración del hotel era encantadora, y los espacios generales estaban bien cuidados. Además, la accesibilidad para personas mayores era excelente, con rampas en todas las entradas, lo que facilitó mucho nuestro movimiento durante la estancia.

La comida y el servicio en el restaurante pueden mejorar.

La atención de David y Victoria es excepcional. No olvides probar las rutas de senderismo cercanas, son impresionantes.

las vistas son increibles y el hotel es acogedor. la habitacion era algo pequeña.

El entorno es mágico y te lleva a otro

mundo. Nos encantó la serenidad del patio y la belleza de la decoración. Victoria y David son anfitriones excepcionales, y Lucky añade un toque especial al lugar. Solo desearíamos que el desayuno tuviera un poco más de variedad en pan fresco.

La decoración del hotel era encantadora y cuidada.

El colchón de muelles era bastante duro y no nos permitió descansar cómodamente. Además, la temperatura de la habitación estaba fría a pesar de tener el radiador al máximo. echamos de menos un ascensor, lo que hizo complicado manejar nuestras maletas por las escaleras.

el entorno es hermoso, rodeado de naturaleza, y las vistas son increíbles. la atención de david y victoria fue excepcional, siempre dispuestos a ayudar y hacer que nuestra estancia fuera especial. el desayuno, fresquito y delicioso, fue un gran comienzo del día.

el acceso a la piscina podría mejorar un poco. ☀️

La habitación era bonita, aunque un poco pequeña y le faltaba una luz lateral para leer. El desayuno podría mejorar, ya que tenía bollería envasada y poco pan fresco. Sería ideal si hubiera persianas, ya que la iluminación no era óptima para dormir.

La habitación era bonita, aunque el colchón era duro.

Un lloc encantador, com de conte! Tranquil·litza l'ànima. Habitació comfortable i un esmorzar top. La parella que treballa aquí són molt amables. Ideal per desconnectar, m'hi quedaria unes quantes nits més.